Perdió a sus padres a los cinco años. Se quedó con sus dos hermanos de tres y un año. Entre sus abuelos y tíos los criaron. “Una manera no deseada de madurar precozmente. Me dediqué a exigirles a mis hermanos y a mí mismo a ser lo menos problemáticos posible”, me dice Ben Schneider.
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Hoy es ingeniero empresarial e industrial, dirige el MBA de la Universidad del Pacífico y es autor de libros alrededor de su experiencia empresarial y académica. Pero este domingo 4 de agosto presentará su primer libro de literatura infantil: Las aventuras de Pico Pico y Poco Poco (editorial Macro), ilustrado por Natalya Lizárraga y editado por Rubén Silva. La cita es a las 5 de la tarde, en la Feria Internacional del Libro de Lima. Habrá una narración oral del libro.
“Nos vamos”, anunció a sus dos hermanos menores. Con siete años organizó la fuga. Vivían con sus abuelos maternos en la calle Torres Paz, a la espalda del Canal 7. El objetivo era llegar a la casa de sus abuelos paternos, en Breña. La travesía empezó a las 7 de la noche. Salieron de la casa a hurtadillas. En la ruta buscaban las calles que los lleven hasta Breña. Eran tres niños caminando en medio de la noche de la Lima de 1962. Y después de cuatro horas, tocaron la puerta de los abuelos paternos. La huida generó conmoción en su familia. Al final, los abuelos maternos y paternos, que estaban enojados entre ellos, se amistaron.
Esta fuga es otro libro, le digo. “Sí pues, otro libro”, me dice y sonríe como si se tratara de una próxima travesura.
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¿Por qué publicar un libro para público infantil?
Ciertamente, he entrado ahora a un territorio desconocido, y tras la experiencia déjame decirte que es bastante más complicado. Si bien tiene un componente familiar, que nace a nivel de mis hijos primero y perduró con mis nietos, que ya tengo cinco, por otro lado, me di cuenta de que venimos haciendo en entornos VICA (vulnerabilidad, incertidumbre, complejidad y ambigüedad), que caracteriza el mundo de los negocios y las organizaciones, y hay un factor determinante que es el tema de las habilidades blandas; estructuralmente, tanto en el colegio, como en la universidad, los currículos están orientados a temas duros…
Es decir, si eres ingeniero en teoría no tendrías opción de publicar un libro para niños, por ejemplo.
Estudiarás procesos, optimización de operaciones, bioquímica si eres médico, pero lo que es determinante en un entorno VICA es mantener una actitud proclive al aprendizaje, tener capacidad de generar empatía y solidaridad, de saber escuchar, de saber preguntar, de respetar y no intimidar para poder motivar, sino inspirar; de alguna manera, tener un poco de espíritu de profesor, de mentor. Ese tipo de habilidades son determinantes. Por mejores cursos que lleves, si no tienes y cultivas estas capacidades, vas a quedar en offside.
Esas capacidades no caducan, están en nuestra estructura.
Y, sin embargo, cuando uno va ascendiendo en la línea de carrera en el mundo del management afloran el egocentrismo, narcisismo, la falta de capacidad para escuchar. La resiliencia es fácil de decir, pero es difícil de implementar.
¿A usted le ha pasado?
Yo he luchado contra eso. Pero una buena manera de curarse en salud es darse cuenta de que el espejo retrovisor, que es aquel que creemos mirar cuando sentimos que nuestra experiencia ha sido exitosa, se vuelve más opaco; conforme el entorno se pone más complejo, el espejo retrovisor tiene menos validez. Eso te obliga a tener una cuota de humildad.
El libro relata la aventura de dos pajaritos hermanos que viajan de la Amazonía a la Costa.
El hermano mayor es un poco el líder, el intrépido, el que programa las actividades. Y el menor lo sigue, pero lo cuestiona y también aporta con su valentía. Se plantean, cada semana, una aventura para ver cómo pueden ayudar. Desde la génesis está la empatía, la solidaridad, la preocupación por el prójimo. También se denota la curiosidad por aprender, el ser audaz, no quedar paralizado ante los retos. Y son solidarios no solo con su hábitat, sino también se preocupan por los niños y la naturaleza…
¿Pero qué activó que se anime a escribir un libro para niños?
Está el componente familiar. Mis nietos, casi, casi como sindicato, me vinieron a pechar y a decirme “pero si tú escribes libros para grandes, por qué no escribes el libro de Pico Pico y Poco Poco”. Inventé el cuento cuando mis hijos estaban chicos, luego seguí con los nietos y el tema pegó. Y ellos me decían “ahora cuéntame la aventura de Pico Pico y Poco Poco en el parque de diversiones”. Y ya me mueven el corazón cuando me traen un par de personajes troquelados y pintados y me dicen “así serían Pico Pico y Poco Poco”. Y ahí dije “ahora sí, vamos a intentarlo”. El libro tiene un trasfondo ecológico, que es fundamental, ya no es cliché, es un tema de urgencia. Y también es una aventura sobre la unión familiar, que me parece es fundamental para poder lograr que estos conceptos cuajen desde la niñez. No será posible una convivencia por más tecnología que nos acompañe, si no prevalecen estas habilidades blandas tan valiosas.
¿Falta que más personas de empresa se involucren con el libro, con el arte?
Todo empresario de hoy sabe que tiene que estar permanentemente actualizándose, leyendo, informándose. Me gustaría que sean más leyendo y escribiendo sus experiencias… Mi libro no es un decálogo de qué hacer y qué no hacer. No. Deja espacio para las preguntas.
Autoficha:
-“Soy Ben Schneider Spielberg. Tengo un primo del lado Spielberg que su papá emigró de Europa a Estados Unidos, coincidentemente a Filadelfia y el padre del cineasta Steven Spielberg también es de Filadelfia. Pero es solo una coincidencia, no hay nada más”.
-“Soy Ben Schneider Spielberg. Tengo un primo del lado Spielberg que su papá emigró de Europa a Estados Unidos, coincidentemente a Filadelfia y el padre del cineasta Steven Spielberg también es de Filadelfia. Pero es solo una coincidencia, no hay nada más”.
-“Tengo 69 años. Estudié Ingeniería Industrial e hice una maestría en management, pero mi relación con la Universidad del Pacífico empezó en 2009, y me llevó a meterme cada vez más en el mundo académico. Hice un doctorado, un DBA. Tengo un podcast en Pacífico Business School (pbs.edu.pe)”.
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