PUBLICIDAD
Maria Grazia Polanco: “Estoy plena, pero quiero ser actriz”
Es parte de la orquesta de salsa Bembé y conduce el popular programa de televisión Domingos de Fiesta, vía TVPerú. Canta desde los 13 años y hoy, a los 28, tiene la actuación en la mira. Perú21 entrevistó a Maria Grazia Polanco.
Imagen
Fecha Actualización
Se sabe de memoria más de 4 mil canciones. “Me sé todas”, afirma. No lo dice, pero tal vez las aprendió desde los 13 años, cuando comenzó a cantar en el colegio. No cumplió con una tarea de arte y la iban a reprobar en el curso. Debía confeccionar una manualidad alusiva a la Navidad. Todos llevaron su trabajo, menos ella. “Párate ahí, canta o baila, haz piruetas. Pero yo te jalo”, le dijo la profesora. Era tímida, pero no para cantar. Se paró y lo hizo. El salón la aplaudió. No solo aprobó el curso, los siguientes años participó en todas las actuaciones escolares y juegos florales.
Maria Grazia Polanco es cantante de la orquesta de salsa Bembé, que alista un single compuesto por Antonio Cartagena. Y va rumbo a cumplir un año en la conducción del popular programa de televisión Domingos de Fiesta que se transmite, a las 2 p.m., por TV Perú.
¿En qué momento una ocurrencia escolar se convirtió en su trabajo? A los 13 años ya era del tamaño que tiene hoy, con 28 años. Cantó en la boda de una tía con la orquesta digital donde trabajaba su hermana, de 19. Cuando la hermana no podía, convocaban a Maria Grazia. Un año después, empezó a trabajar de noche y a estudiar por la tarde, pese a que a su madre no estaba de acuerdo. Tenaz y rebelde, siguió en el canto y hoy tiene en la mira la actuación.
Me dices que a todos los artistas les gusta ser el centro de atención. Qué bueno que lo digas, muchos artistas prefieren no decirlo.
Pero centro de atención de manera positiva. Es verdad; si no, haz arte en tu casa.
¿Y cómo sientes que te va?
Muy bien. Inicialmente, estaba medio tensa porque no sabía cómo iba a hacer con mis horarios con la orquesta y estaba a puertas de sacar mi propia marca de ropa. Pero cuando amas algo, el tiempo y la energía salen de donde sea.
Se nota que lo disfrutas.
Domingos de Fiesta es como una fiesta en mi casa. Así lo siento yo.
Imagen
Tienes ángel. ¿Eso se potencia o sale naturalmente?
No quiero que suene soberbio, pero sí me lo han dicho. Yo más que nada disfruto y cuando pasa eso, lo transmites. No solo me pasa en Domingos de Fiesta sino también con la orquesta. Hay artistas que tienen muy bonita voz y bailan muy bien, pero algo falta. Y de pronto, están pensando en cantar bien y bailar bien, pero eso no lo es todo. Hay ese ‘no sé qué’ que la gente se engancha, y es porque lo están disfrutando. Si lo disfrutas, la gente también.
Ahí te creen.
Ahí te compran. Cuando es forzado, lo sienten. Me considero auténtica. En el escenario te olvidas de lo malo o tratas de que así sea. Eso me ha pasado hasta en las circunstancias más duras.
¿Cómo cuáles?
La muerte de mi papá, hace dos años. Yo estaba concursando en el programa de Gisela. Mi papá enfermó cuando esta propuesta estaba caminando y murió a la semana siguiente de mi debut en el programa. Fue un shock. Yo salía del ensayo final en el canal cuando me llamaron del hospital. Entré en shock, mucha confusión. No dormí días. Caí en ansiedad, usé una medicina para no sentir dolor, pero fue malo porque fue como dormir el dolor un rato. No pude dar mi 100% en toda esa temporada. Todo ese año fue durísimo, porque a los dos meses falleció mi abuela, con la que nací y crecí, y al día siguiente tenía que viajar a Arequipa y no fui al velorio.
Como se suele decir, el show debe continuar.
Sí. El payaso se pinta la cara y sale a trabajar, y su trabajo es hacer reír. El artista es igual. Pero yo siento que mi padre está conmigo en mis logros más bonitos, y siempre hablo con él. Mi papá estaba orgullosísimo de mí y sabía que yo podía dar más. Lo hice por él y se lo dediqué a él. Pero en silencio. En ese momento no lo conté en el programa de Gisela, porque no quería hacer un show de eso.
Imagen
Hay quienes, más bien, usan su vida personal para ganar popularidad.
La familia es algo sagrado. Yo pude decir muchas cosas, pero con mi familia no. De más chibola he cometido errores y de pronto he estado envuelta en dimes y diretes, pero por mi inexperiencia, tenía 17 años, era una chica inmadura. Ahora tengo 28 y soy más consciente de lo que quiero. Quiero que se me conozca como una artista, no necesito nada de eso. No tengo por qué caer en lo bajo.
Me parece que Domingos de Fiesta es un gran paso para afirmar una carrera en esa línea que buscas.
Es un programa familiar y muy bonito. Pero más allá de eso, está vinculado a la música, que es lo que me gusta.
Y te deben haber ofrecido entrar a programas reality.
Sí. No vas a alcanzar fama más rápido porque juegues bien en los reality sino porque te pelearás con fulano y mengano, o un romance con tal y tal. Y no lo culpo, cada uno elige.
Empezaste a los 13 años. ¿No hubo un momento en el que te asustaste, siendo tan joven?
Sí, claro. Cuando trabajas de noche, ves muchas cosas, todo eso era un mundo nuevo para mí. Me asustó la vida bohemia que llevaban y cómo lo normalizaban. Las peleas entre músicos.
¿Entiendo que se debe tener carácter para afrontar esos momentos?
Disciplina.
¿Que tus padres se hayan separado cuando tenías 6 años no te afectó?
Sí. Pero en ese momento no me di cuenta, lo noté en la adultez, por las decisiones que tomaba, las relaciones que elegía. Llevé terapia psicológica. Considero que he sanado muchas cosas. Y me falta aún por sanar.
Imagen
¿Tus padres qué te decían de que seas artista desde tan temprana edad?
Mi papá me decía que está bien como hobby, pero que estudiar una carrera me daría seguridad. Yo le decía que trabajaba en la música porque me quería pagar una carrera. Y yo siempre quise ser abogada, desde chiquita, pero no llegué a estudiar Derecho. El arte nunca lo voy a dejar, así la gente crea que no es una carrera. Pero sí me gustaría estudiar algo para administrar mi propio negocio más adelante.
¿Te han dicho que lo que haces no es una carrera?
Sí o existe la presión de “oye, cuándo vas a estudiar, los años se pasan”. Lo importante es que seas feliz.
¿Y qué te falta ahora para ser feliz?
Quiero la internacionalización como cantante, quiero hacer novelas, ser actriz. He hecho teatro musical, pero me gustaría hacer drama, y puedo hacerlo. Pero en este momento estoy plena y, como mujer, me gustaría ser mamá, tengo amor maternal. Pero no sé cuándo (ríe).
Pero estás tranquila en el amor, ¿no?
Sí. No me quiero enamorar (risas). Ahorita no. Soy muy emocional.
Y también se te ve bien racional.
Ahora sí. Sería el colmo que no (ríe). Me he equivocado tanto, que ya… (risas).
AUTOFICHA:
-“Soy Maria Grazia Angelina Polanco Piña. No me gusta Angelina (ríe). Cuando estaba en el colegio ya trabajaba. Tengo 28 años, nací en Lima. Mis padres son de Lima, mi abuela materna es de Arequipa y mi abuela paterna de Guadalupe, La Libertad”.
-“Estudié Marketing en un instituto, a los 18 años, hasta los 19. Después también estudié Neuromarketing. Desde los 14 estudié canto con Isabel Iñigo, de Cuba. Estuve en talleres de actuación; actualmente, con Armando Machuca”.
-“Voy a abrir mi boutique y con mis hermanos manejo algunas cosas que mi papi dejó en el norte. La boutique se llamará OMG. Y se viene un tema inédito para orquesta Bembé, una composición de Antonio Cartagena, es un gran compositor”.
VIDEO RECOMENDADO:
PUBLICIDAD
ULTIMAS NOTICIAS
Imagen
Imagen
Imagen
PUBLICIDAD