Refinería de Talara: ¿Qué ventajas traerá el uso de tecnología en la producción de combustible?

Carlos Barrientos, gerente general de Petroperú, explicó que la demanda total del país actualmente está alrededor de 260 mil barriles diarios. Sus esfuerzos están enfocados en la puesta en marcha de la modernización de la refinería de Talara, que pasará de producir 65 mil a 95 mil barriles al día, para complementar con la producción de las refinerías de Conchán e Iquitos, entre 10 mil y 15 mil barriles diarios, cada una.

“La nueva refinería de Talara significa para el país una obra emblemática que nos da seguridad energética importante y refuerza la figura estratégica de Petroperú en el país. Nos ha dado 4 mil puestos de trabajo de forma permanente durante la construcción y hemos aportado al Fisco alrededor de US$ 800 millones”, apuntó.

Recordó la exitosa colocación de bonos corporativos que realizó la compañía hace un mes y medio en el extranjero por US$ 1.000 millones, que es el último tramo que faltaba para el financiamiento de Talara, encontrando una buena respuesta del mercado. Actualmente, la nueva refinería está al 94% y debería estar lista para operar en noviembre del presente año.

Barrientos también se refirió a la tecnología que vienen aplicando en la nueva refinería que va a ser una de las más complejas de la industria. Con unidades de procesos adicionales más completos que la anterior, y con la metodología de procesos, planean incorporar el flexicoking, que permitirá a la refinería procesar todo el crudo sin desperdicios ni residuales, sacando productos de valor agregado, con lo que la rentabilidad será mucho más atractiva.

Además de Talara, el ejecutivo resaltó la estrategia de integración vertical en Petroperú con la que esperan regresar pronto al Lote 192. “Estamos por definir el socio operador, esperamos que Perupetro termine la consulta previa, y en mayo o junio deberíamos tomar el lote”, indicó. Asimismo, tienen el Lote 64, que está más demorado pero a finales de año deberían tener socio operador, y en el Lote 8, que no es de Petroperú, están llanos a trabajar con el Estado y encontrar una fórmula interesante, para que no esté parado.

Asimismo, son conscientes que el consumo de combustibles fósiles va a ir cayendo de aquí a unos años, y por eso han cambiado la visión a ser una empresa de energía, mirando el mundo de las energías renovables como parte de la estrategia de sostenibilidad.

Por ello en Talara también se producirán productos como la gasolina y diésel Euro IV (hasta 50 partes por millón –ppm-) y EuroVI (hasta 10 ppm) al 2023 aproximadamente, “con lo que habrá productos ecoamigables, lo que se traducirá en más salud para los peruanos”.

Respecto al paro de transportistas y los ajustes a los que se comprometieron para llegar a un acuerdo, refirió que Petroperú no está solo, sino que está con varios jugadores internacionales importantes con los que tienen que pelear galón por galón en la calle.

“Es importante mencionar que el precio internacional está subiendo, y está por encima del precio precovid. Eso afecta definitivamente el precio local. Y, al ser un mercado abierto, los precios se rigen por oferta y demanda. Si bien esto afecta al sector transporte, la crisis es para todos en general. Seguiremos haciendo esfuerzos desde el lado de la eficiencia interna, pero si los precios siguen aumentando, toca aumentar”, dijo.

Existen críticas en torno a Petroperú de por qué hacer una refinería si no hay suficiente petróleo en el país. Al respecto, Gustavo Navarro, socio director en Perú de Gas Energy Latin America, recordó que los países europeos como Alemania, Francia, España, Portugal e Italia tienen refinerías y ninguna produce petróleo. El mismo caso de Chile que tiene dos refinerías de alta conversión, y tampoco produce petróleo. “Es más, las refinerías más sofisticadas y modernas del mundo, están en Japón y Corea, donde tampoco se produce petróleo”.

Sobre los cuestionamientos de la rentabilidad de una refinería, Navarro comentó: “¿Qué es lo más cobarde en el mundo? El dólar, porque huye y se queda en una inversión segura. Cuando Petroperú salió en dos oportunidades a buscar financiamiento sin garantías del Estado consiguió ofertas que superaron ampliamente de 4 a 6 veces el monto que estaban pidiendo, con tasas de interés bajas y a plazos largos. Este año ha vuelto y la respuesta ha sido entusiasta, y hay que tener en cuenta que el inversionista pone su plata donde es rentable”.

En esa línea, resaltó que la nueva refinería está diseñada para procesar crudos baratos y pesados, porque la tecnología los limpia, lo que significa que se ahorrarán montos considerables en la compra de crudo. Además, si se piensa en cerrar la refinería, hoy día la legislación no permite dejarla así no más, se tiene que entregar el terreno como si nunca hubiera habido nada de petróleo, descontaminarlo todo. Y en ese lugar se extrae desde 1917, por lo que limpiar todo, sería tremendamente costoso.

Sobre la refinería de Talara, Arturo Vásquez, ex viceministro de Energía, sostuvo que es un proyecto controversial porque esta demanda una inversión bastante grande que se ha desarrollado a lo largo de muchos años. “Estamos hablando de un proyecto que viene del 2008, pero se concreta su financiamiento con una Ley de modernización de la refinería de Talara que se dio en el 2013, y se han desembolsado cerca de US$ 7 mil millones, el mismo costo de lo que hubiera costado el Gasoducto Sur Peruano”.

Añadió que el gran problema de esta refinería es que ha tenido demasiados atrasos, y ya estamos en un momento de transición energética. “Y esa transición está llevando a un esquema de descarbonización, de utilizar menos hidrocarburos y más electricidad”.

Para Vásquez, la pandemia obliga concretar muchos cambios respecto a cómo se observa el tema del transporte, que evidentemente va a desfasar el uso del petróleo progresivamente, por lo que reconoció tener una seria preocupación de cómo es que se va a recuperar ese capital invertido, que finalmente es dinero del Estado.