En el jardín infantil Casita Amiga, ubicado en el sector Cruz de Motupe, en San Juan de Lurigancho, se han registrado cuatro robos consecutivos pese al estado de emergencia en el distrito.
El último asalto ocurrió la madrugada del domingo, cuando delincuentes ingresaron al jardín infantil por las ventanas y robaron materiales esenciales, entre ellos útiles escolares, juguetes y hasta la mochila de emergencia en caso de sismos.
“Es la cuarta vez que estos malhechores entran a nuestra institución. Esto ya cansa y afecta nuestra labor educativa. Nos hemos esforzado en construir este espacio prácticamente desde cero”, señaló Doris Sánchez, directora de la institución a Latina Noticias.
Además de los robos, la inseguridad en el área circundante del jardín infantil agrava la situación. Sánchez mencionó que un parque cercano se ha convertido en un punto de reunión para personas en situación de drogadicción, aumentando la sensación de riesgo.
“Son niños pequeños y están vulnerables no solo a los robos, sino también ante la inseguridad ciudadana. En el parque al costado merodean personas de mal vivir. La Policía Nacional y el serenazgo tienen conocimiento de esto”, añadió.
Carlos Mendoza, presidente de la Asociación de Padres de Familia (APAFA), también se pronunció, exigiendo una respuesta urgente de las autoridades: “Aquí no hay presencia constante de la Policía ni del serenazgo. Es necesario que instalen una caseta de vigilancia, ya que esto es un jardín infantil y los niños merecen un entorno seguro”.
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