La castración química no garantiza que alguien deje de ser disocial

Fecha Actualización

23/04/2022 - 07:00

La propuesta del Ejecutivo sobre la castración química sigue levantando polvareda. ¿Tendrá efectos? ¿Disuadirá al victimario? La castración química (ver infografía) suprime el nivel hormonal de la testosterona que le da al varón agresividad, la líbido, que es parte del proceso de excitación y de erección, nos explica el doctor Mariano Cuentas Jara, jefe del Servicio de Urología del Hospital Edgardo Rebagliati.

¿Realmente anula el deseo al violador? “El punto básico: la erección, el deseo, es un proceso muy complejo. El deseo sexual comienza en el cerebro, con un estímulo visual, con un estímulo auditivo, un estímulo táctil, donde no solamente está implicada la testosterona, hay otros neurotransmisores a nivel cerebral que van a estimular al varón, van a darle un apetito sexual”, precisa.

Cuentas sostiene que si se le suprime la testosterona, el varón todavía puede tener deseo sexual. “Tal vez no tenga erección y por esa frustración tal vez lo vuelva más agresivo. Hay cada sociópata, cada disocial, que hace cada cosa, cada perversidad con tal de satisfacer su deseos”, advierte.

“La castración química no es la solución para que alguien deje de ser disocial o sociópata en el contexto de un violador. La castración química tiene una indicación médica. La prescriben urólogos, endocrinólogos, ginecólogos”, finaliza.

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