La Cicciolina: De la mítica leyenda del porno a tener que vender sus cosas para poder salir de la bancarrota

La historia del cine para adultos no estaría completa sin mencionar el nombre de la Cicciolina, el nombre artístico con el que Elena Anna ‘Ilona’ Staller alcanzó lo más alto de la fama en esta industria.

De dorados cabellos y exuberante figura, la Cicciolina rápidamente se convirtió en la fantasía de miles de sus seguidores y fans, quienes apreciaban su trabajo en la industria para adultos.

Aprovechando la popularidad que tenía decide dar un giro inesperado a su vida y se lanza a la política, convirtiéndose en diputada del parlamento italiano por el Partido Radical en 1987 y haciendo historia al ser la primera actriz porno en ser elegida para un cargo político.

Mientras ocupaba el cargo, y antes de que comenzara la guerra del Golfo, se ofreció a tener relaciones sexuales con el líder iraquí Saddam Hussein a cambio de la paz en la región. Una idea que reconocería como innovadora en una entrevista tiempo después.

? “Era algo innovador: nadie pensaba así del amor, del sexo, de la naturaleza. Nadie hacía política con el cuerpo(...)”, recordó en una entrevista en 2017.

?INSPIRÓ A OTROS PERSONAJES: Esta idea de convertir su fama en trampolín para la política fue posteriormente copiado por otras actrices y bailarinas. En el Perú, el caso más conocido es el de Susy Díaz.

Luego de intentar reelegirse en varias oportunidades, con otros partidos políticos, la Cicciolina no consiguió permanecer en el ámbito político, por lo que decidió dedicarse a su vida de modelo y cantante, teniendo apariciones esporádicas en algunas películas y telenovelas.

Ahora, con 67 años, Ilona Staller confesó a la revista Vanity Fair que se encuentra atravesando su peor momento. Sus problemas económicos la han llevado al punto de que ha tenido que empezar a vender varias de sus pertenencias para subsistir.

Reveló que pese a ser una leyenda de la industria del entretenimiento para adultos y haber ocupado un cargo político, no tiene ahorros y para poder vivir es que pone a la venta varias de sus cosas, como el vestido con los colores de la bandera italiana que usó al asumir en el parlamento o una de las 50 diapositivas originales del proyecto Made in Heaven, imágenes alegóricas y porno suaves en las que el famoso artista Jeff Koons la retrató en 1990, y cuyas impresiones han alcanzado cifras cercanas a un millón de euros en subastas.

Incluso ha puesto a la venta su departamento de 250 metros cuadrados en el que llegó a tener hasta un tigre de bengala de mascota que tuvo que regalar, además de su ropa interior usada.

Pero eso no es todo. La Cicciolina vende también “experiencias” a través de sus cuenta en las redes sociales. Sus seguidores pueden conseguir comprar momentos junto a ella que van desde comer una pizza o jugar ajedrez hasta un show íntimo.

Pero en la entrevista hace una aclaración importante, sus experiencias no incluyen sexo. En un arranque de sinceridad ella revela que ya tiene más de tres años sin tener sexo.

“Hago el amor en casa conmigo misma, los hombres ya ni siquiera lo intentan conmigo. Soy una mujer como todas. No quiero uno que pruebe a la Cicciolina y luego desaparezca. Quiero una persona seria, alguien que me quiera", sentenció.

- Elena Anna ‘Ilona’ Staller nació en Budapest, Hungría. Pero se nacionalizó italiana al casarse con Salvatore Martini y se instaló en Roma.

- El apodo Cicciolina nació cuando ella participaba en un programa radial de corte erótico en la emisora privada Radio Luna. En dicho espacio ella contestaba las llamadas de los oyentes a los que llamaba ‘cicciolini’ y ‘ciccioline’, que traducido del italiano significa ‘querido’ o ‘queridísimo’.

- Comenzó a aparecer en películas desde 1974 bajo el seudónimo de Elena Mercury, pero a medida que sus apariciones crecían, el apodo Cicciolina fue ganando más relevancia.