La vez que ‘Popeye’ fue obligado a matar a su novia: “Yo la quería con toda mi alma”

Fecha Actualización

08/02/2020 - 09:35

Tras la muerte de John Jairo Velásquez Vásquez, conocido como 'Popeye’, salieron a la luz varias de las leyendas que giraron en torno al jefe de los sicarios del cártel de Medellín.

Una de estas historias está vinculada a una orden que recibió el delincuente de su propio patrón y que ejecutó con frialdad pese a que esta implicaba acabar con la vida de la mujer que él consideraba “el amor de su vida”.

Wendy Chavarriaga Gil fue una de las amantes del ‘Patrón’. Ella, al igual que otras varias jóvenes con las que Escobar se había involucrado, disfrutó de la vida de excentricidades y lujos que implicada la relación con un capo colombiano del narcotráfico. Sin embargo, cometió un error y quedó embarazada.

Al enterarse de esta situación, Escobar le ordenó a la joven que abortara pues temía un conflicto conyugal con su esposa. Luego cumplir con las órdenes, Chavarriaga terminó la relación con el capo de la droga y planificó su venganza que incluía enamorar a Velásquez Vásquez para conocer los movimientos del narcotraficante y delatarlo ante las autoridades.

“Cometió el craso error de quedar embarazada, porque el patrón le tenía prohibido eso. De mala intención se hizo embarazar. Escobar le mandó un médico e hizo que le sacaran el bebé”, relató el sicario al diario El Clarín.

En medio del supuesto romance, Escobar, quien había dado la venia para que su principal sicario y su examante mantengan una relación, descubrió las verdaderas intenciones de la mujer y ordenó interceptar sus comunicaciones, descubriendo que esta mantenía comunicación con la Policía, la DEA y la CIA que ya le seguía los pasos. Inmediatamente dispuso su muerte.

“Ella me enamoró para que le dijera dónde estaba Pablo Escobar y entregarme a las autoridades para poder llegar a él. Caí como un bobo”, contó ‘Popeye’.

Pese al profundo amor que sentía por ella, ‘Popeye’ aceptó las órdenes de su jefe sin cuestionarlas y organizó el asesinato de Chavarriaga que incluyó la invitación a un restaurante donde finalmente ejecutaría su plan.

“Yo la quería con toda mi alma (...) Es uno de los episodios más dolorosos de mi vida. Era una mujer muy hermosa, podía ser una reina de belleza”, dijo ‘Popeye’ a El Tiempo.

De esta manera, el sicario fallecido este jueves en un hospital de Bogotá debido a un cáncer de estómago, dejó claro que, aún cuando implicara acabar con la vida de alguien querido, estaba dispuesto a cumplir sin cuestionamientos con todas las disposiciones de Escobar.