Siria: Ejército y rebeldes envían refuerzos a Alepo

Se libra dura batalla en segunda ciudad del país. Turquía cierra controles fronterizos, pero recibe a refugiados. Israel teme que armas químicas sirias lleguen a milicias como Hezbolá.

Redacción PERÚ21

Fecha Actualización

22/08/2019 - 02:57

El Ejército sirio envió hoy más refuerzos a Alepo, ordenando a una columna blindada que avance sobre la segunda mayor ciudad del país y ataque a los combatientes rebeldes con artillería y helicópteros, dijeron activistas de la oposición.

"Cientos de rebeldes procedentes de todo el norte de Siria están llegando a Alepo en lo que parece ser la batalla decisiva", declaró el corresponsal de un diario sirio en Alepo a la agencia AFP. Rami Abdel Rahman, presidente del Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH) en Gran Bretaña, confirmó esta información.

Las fuerzas sirias dispararon artillería y misiles hacia al-Tel, un suburbio ubicado al norte de Damasco, en un intento por recuperarlo de manos de los rebeldes, provocando pánico y forzando a cientos de familias a huir, dijeron residentes y activistas de la oposición.

A medida que las hostilidades se intensificaban cerca de la frontera turca, Turquía dijo que estaba cerrando sus puestos fronterizos, aunque Naciones Unidas indicó que los refugiados que huyan de Siria podrían ingresar al país.

Dos altos diplomáticos sirios, en los Emirates Arabes Unidos y Chipre, han desertado, convirtiéndose en los últimos funcionarios en abandonar el Gobierno, dijeron rebeldes.

Algunos destacados miembros de la familia del presidente sirio Bashar al Assad no confían en la supervivencia del régimen. La agencia dpa en Estambul reportó que Mohamed Majluf –hermano de la madre del mandatario– y su hijo intentaron establecer contacto con el exterior en busca de un lugar donde exiliarse.

ISRAEL LANZA ADVERTENCIAEl canciller israelí, Avigdor Lieberman, advirtió hoy que su país actuará inmediatamente si descubre que milicianos islámicos se apoderan de los arsenales de armas químicas o biológicas de Siria.

Políticos y funcionarios de seguridad israelíes observan con preocupación la guerra civil en Siria, temerosos de que Hezbolá –en Líbano– y otros grupos milicianos puedan tomar el control de esos arsenales si se desploma el régimen sirio.

A medida que crece la retórica belicista, los israelíes se apresuran a abastecerse de máscaras antigás. La demanda casi se ha duplicado a 4,200 ayer, en comparación con el promedio anual de 2,200.

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