Alfonso Barrantes y la alcaldía de Lima

El jueves 30 de noviembre hubiera cumplido 90 años. Nació en la provincia de San Miguel, provincia de Cajamarca. Su primaria la hizo en el colegio fiscal N° 73 en San Miguel de Pallaques, capital de la provincia. Desde entonces, se le conoció como “frejolito”. Siendo alumno de secundaria, fue apresado por protestar contra la detención de uno de sus profesores, cercano al Apra. Tuvo que terminar sus estudios en Trujillo, en el colegio nacional San Juan. Estudió Derecho en la UNMSM, siendo elegido presidente de la Federación de Estudiantes.

Renunció al Apra de la “convivencia” en 1957, se declaró marxista y mariateguista. Ejerció el derecho laboral en defensa de los trabajadores siendo detenido varias veces y conoció la cárcel. Se identificó con la revolución cubana. Fue un factor clave en la creación de IU en setiembre de 1980, y en noviembre quedó segundo en las elecciones municipales en Lima Metropolitana. Nunca concilió con el senderismo.

Ganó las elecciones para la alcaldía de Lima en 1983. Obtuvo el 36% de los votos, Apra 27%, PPC 21% y AP 12%. A los tres meses hizo realidad la organización de los comités de vaso de leche para los niños, que repartían un millón de raciones, y los visitaba permanentemente, de ahí lo del “tío frejolito”. Impulsó, ante la demanda de terrenos y vivienda de los “sin techo”, la ocupación organizada por la municipalidad de nuevos asentamientos urbanos en Manchay, Laderas del Chillón y principalmente la de Huaycán. Decenas de miles de familias hicieron realidad sus sueños.

Caminaba por las calles recibiendo el saludo de todos y tomaba su café en un local del jirón Lampa.

Condujo el concejo municipal democráticamente. Transparente en el ejercicio del poder, no tuvo juicio alguno, al final de su gestión fue aplaudido por todas las fuerzas políticas. Abandonó el cargo en el mismo VW de 1972 con el que ingresó.