PUBLICIDAD
Sin colegio que los resista
Imagen
Fecha Actualización
Los casos de los congresistas Moíses Mamani y Yesenia Ponce, ambos representantes de Fuerza Popular, los dos denunciados por mentir en sus hojas de vida, por consignar estudios escolares que no pueden demostrar, han vuelto al escenario.
Ayer concluyeron los 120 días de suspensión que la Comisión de Ética recomendó para la congresista Ponce. En agosto, tras un largo proceso que fue dilatado sin tapujos por la bancada fujimorista, Yesenia Ponce fue suspendida. La certeza de que habría pagado poco más de S/10 mil al ex director de un colegio para que le emita certificados de estudios secundarios falsos, cobra cada vez más fuerza.
Aun así, hace apenas tres días, la Comisión de Levantamiento de Inmunidad Parlamentaria le devolvió al Poder Judicial la solicitud para quitarle esa protección. La excusa para rechazar el requerimiento fue que este debe subsanar la documentación que envió. Un argumento ya usado anteriormente.
El expediente de Ponce se encuentra en la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales, el pleno del Congreso lo envió hace cuatro meses, pero esa instancia ni ha tocado el caso. El presidente de esa Subcomisión, el fujimorista César Segura, ya ha dicho que las denuncias que le lleguen se debatirán por orden de llegada.
Moíses Mamani seguió los pasos de Yesenia Ponce. También fue suspendido por 120 días -aunque el castigo que se le impuso obedece a los tocamientos indebidos que practicó contra una aeromoza de la aerolínea Lan-. Y en los últimos días un juez de Puno también ha pedido el levantamiento de su inmunidad parlamentaria; va a procesarlo por falsificación de documentos, concretamente, de certificados de la escuela secundaria.
Tanto Ponce como Mamani merecen que se les levante el derecho a la inmunidad: No es posible que el Congreso mantenga a dos parlamentarios que ni siquiera pudieron terminar el colegio. Pero peor, porque para tapar sus limitaciones y sus mentiras se inclinaron por el delito, ya sea de falsificación de documentos o de corrupción de funcionarios.
¿Qué harán sus colegas de Fuerza Popular? Los que los auparon para que llegaran al Congreso ¿Los seguirán blindando? Ya hicieron malabares para protegerlos de la justicia ¿Volverán a hacerlo?
Sin embargo, la gran pregunta es qué piensan de esta situación los fujimoristas, los ciudadanos que apoyan al partido naranja. Cómo se digiere, cómo se procesa la complicidad.
El Perú se merece buenas autoridades pero mejores ejemplos.
PUBLICIDAD
ULTIMAS NOTICIAS
Imagen
Imagen
Imagen
PUBLICIDAD