Esa bandera jamás existió

-¡Qué risa que por aquí algunos caviares, guaripoleras y rojimios aleguen que los militares “golpearon” a Evo al invocarle que deje el poder cuando nuestros “mandiles rosados” hicieron algo similar, santificando el cierre ilegal del Congreso por parte de Vizcarra con esa foto junto a él! ¿Acaso Vizcarra no echó mano y le dio protagonismo al “partido más antiguo del Perú” (Basadre dixit) al juntarse con ellos para ese “selfie” golpistoide? Tan bananero fue lo sucedido en Bolivia como lo que ocurrió aquí, donde los civiles voltearon hacia los uniformados como los árbitros finales de un impasse constitucional.

-Se jodió España con esta coalición que ha anunciado el gobernante socialista Pedro Sánchez con el ultraizquierdista Podemos. Lo bueno es que la Unión Europea será un freno, como pasó con la izquierda griega. Pero los que sí se jodieron definitivamente son los chilenos con este cambio futuro de Constitución. Aparte de que es muy bananero eso de estar cambiando de Constituciones y que eso no arregla los problemas, van a reemplazar una que les trajo mucha prosperidad por otra seguramente más a la izquierda y demagógica. Se suicidaron los chilenos, que quieren vivir como suecos con una productividad de chilenos. Demolieron una imagen tan laboriosamente construida por décadas. Solo aquí Mechita Araoz y otros frívolos e ingenuos tecnócratas se podían creer ese cuentazo de que somos dignos de la OCDE. Ni los chilenos.

-“La bandera del Tahuantinsuyo” jamás existió. Eso es una invención del cuentero periodista radial cusqueño Raúl Montesinos Espejo en 1973. Tampoco eso de los preceptos ama llulla, etc., una falacia del militar Miller, popularizada por los historiadores europeos Markham y Cantú.

-¿Por qué será que el coleguita Eloy Jáuregui me recuerda cada vez más a Toledo?