Tres temas vergonzosos

Si hubiese que reconocerle una habilidad a este gobierno, esa sería su capacidad de eludir con absoluto desparpajo el conflicto. Piénselo. Salvo la vez del pedido de confianza (y eso es), ¿con qué o con quién se ha enfrentado el Gobierno de manera deliberada en su año y pico de gestión? (Okey, okey, con la delincuencia común, pero ese fue el ministro, no el Gobierno).

Enfoque de género (derechos humanos): el 28 de julio habló PPK de una inclusión que trasciende la localidad geográfica y el nivel socioeconómico. Los fujis ya se lo volaron de todos los D. Leg. (y por poco no le quitan los beneficios carcelarios a los violadores porque la ley tenía la palabra género en el título), y en el Minedu el ministro mira el enfoque de género con sospecha y, como dicen los viejos, ante la duda, motor. ¡Pa’ fuera! Ah, y PPK aún no recibe a las víctimas de los años del terror, pero se toma selfies y pasea a Kenji por el jardín. Para eso sí tiene tiempo.

Reforma tributaria: Desde que el hoy ex ministro Thorne le pidiera al gobierno anterior que no firme la norma 16 (norma antielusión), se veía que los ppkausas siguen pensando que las recetas de los 90 no se han agotado. A diferencia de los demás asuntos en los que han quitado la patita, aquí nunca la pusieron y la propia ministra Cooper dijo que eso está en la cola (en el pipeline), eufemismo por “congeladora”. Elude nomás, yo me sigo haciendo el sonso. La recaudación cae, el presupuesto de los programas sociales se reduce. Y los fujis le regalan plata a las aerolíneas.

Destrabe: Estado se mete la mano al bolsillo y cede todas las veces. Todas. Y pone al gato de despensero en Proinversión.