Fernando Cáceres: Bebiendo a oscuras

El 30.6% de bebidas alcohólicas que se venden en el Perú son ilegales. Esto incluye las bebidas adulteradas, artesanales-ilegales, de contrabando y las que evaden impuestos. Es una de las tasas más altas en toda Latinoamérica (Euromonitor, 2013) y la adulteración es la causa más frecuente (casi 60% del total). Conseguir bebidas adulteradas en Lima es muy fácil, según comprobó Contribuyentes por Respeto en un reciente trabajo de campo. En algunos casos es fácil identificar la adulteración, como en una botella de cerveza con tapa de alcohol yodado rellenada para vender anisado. En otros, no tanto, como el de una botella de buena apariencia que imita la imagen de una marca conocida, engañando al público. Hay bebidas con registros sanitarios o RUC falsos o vencidos. Hay botellas mal lavadas y hasta con partículas en el líquido, posiblemente metanol, cuyo consumo es mortal, incluso en bajas cantidades. Ilegalidad y atentados contra la salud hay para escoger, aunque sospecho que las acciones de prevención y fiscalización están siendo insuficientes y que hay demasiadas entidades públicas con funciones asignadas (Produce, Digesa, municipalidades, Policía Fiscal, Sunat), el gran problema para poder evaluarlas es que las autoridades competentes no tienen datos o afirman no tenerlos. Si no tienen los datos para evaluar su propia gestión, están contraviniendo la política nacional de modernización de la gestión pública; si los tienen pero no los quieren entregar, están transgrediendo los compromisos de la Alianza para el Gobierno Abierto, según la cual la sociedad civil debe acceder fácilmente a información relevante para ?scalizar a los funcionarios. Sin datos, no hay cómo evaluar a las autoridades, ni diseñar mejoras en las políticas públicas. Mientras no se resuelva, la única "política de Estado" para lidiar con el alcohol ilegal (y otros problemas públicos), seguirá siendo proponer nuevas regulaciones (usualmente absurdas) a ciegas, y que generen apariencia de que algo se está haciendo.