Luis Davelouis: Anti

"Tu antifujimorismo y tu odio no te dejan pensar con claridad", me dijeron una vez en respuesta a una afirmación clara: Fujimori está preso por violación de derechos humanos y corrupción, y no ha pagado un sol de la reparación civil que le debe al Estado (o sea, a todos). También hablaban de antiaprismo y de odio y obsesión por Alan García cuando recordaba los 'narcoindultos' y al procesado Gerald Oropeza y sus innegables vínculos con el Apra.

Me acabo de sorprender leyendo el párrafo anterior buscando algo que pudiera ser considerado difamatorio. Lo que pasan Fernando Valencia (sentenciado por reproducir lo que dijo Humala) y Rafo León (procesado por opinar) sienta un precedente peligrosísimo en lo que se refiere al ejercicio de la libertad de expresión. Y será todavía peor si se aprueba la modificación del Código Penal para casos de injuria, calumnia y difamación –herencia que nos dejan Eguren, Mávila y Beingolea–: un periodista podría purgar prisión efectiva por decir o escribir lo que piensa.

No he borrado ni añadido una letra al primer párrafo porque esto, y no otra cosa, es lo peor que le puede pasar a la libertad de expresión: la autocensura.

Una modificación legal como esa con un solo grupo político concentrando el Legislativo y el Ejecutivo sería letal para la construcción de institucionalidad, la lucha contra la corrupción, la memoria colectiva, la educación y para la economía en el mediano plazo. También para los derechos humanos, pero esos no venden bien.

Odiar es desear algo terrible sobre alguien. Hasta hoy, jamás he odiado a nadie. Intentar ser justo es mucho más difícil que ser "malo" e infinitamente más complicado que ser bueno. Y mucho menos popular. Por eso, plantear que PPK se alíe con Keiko puede ser práctico, pero éticamente es una porquería, sobre todo si te dices liberal.