Luis Davelouis: Racismo y TPP

Hay que ser muy imbécil para, en el caso de César Acuña, bromear con su estatura, su color o su forma de hablar. Demasiado imbécil porque les da en la yema del gusto a sus defensores, como Anel Townsend.

Hay 50 mil razones para pensar que Acuña es un sinuoso y taimado individuo, falso y tramposo. Hay, al menos, cinco instituciones que están realizando investigaciones sobre temas ligados a él, que van desde el lavado de activos hasta sus recientemente descubiertos plagios en su tesis doctoral. Y como si eso fuera poco, el tipo ha sido acusado por su ex esposa de maltratarla verbal y físicamente, llegando incluso a empujarla por las escaleras, y también de haber embarazado a una menor cuando esta era alumna suya. Un joyón.

Pero lo primero que han hecho los cara-de-palo que lo defienden es señalar lo del principio: "Lo atacan porque es del pueblo, porque es cholo, porque habla mal, de puro racismo y clasismo". ¿Hasta cuándo vamos a seguir viviendo en la Colonia? ¿Acaso es un delito ser cholo? ¿Está mal tener la tez oscura? ¿Se puede discriminar a alguien por su tamaño? ¿Y por su manera de hablar el español? No, no, no y no. El racismo se sale en la primera oportunidad que se presente: "¿El tipo es un maldito? Ah, sí, y fíjate que es cholo, negro, enano y habla como la paisana Jacinta". ¿Qué carajo tiene que ver una cosa con la otra? Para que les quede claro, manga de tarados, con esto le están haciendo un favor a Acuña.

PD. Hoy se firma el TPP, un acuerdo que perjudica y amenaza las políticas públicas de salud de nuestro país obstaculizando y encareciendo varios fármacos. ¿Vamos a dejar que las farmacéuticas se salgan con la suya? ¡A tomar la calle! (Y después, al Dragón de Barranco).