Propuestas para la educación superior

1. Modificar la Ley Universitaria para ampliar las funciones de la Sunedu a toda la educación superior. Establecer que el superintendente sea elegido por concurso público por Servir para asegurar su autonomía y fortalecer la institucionalidad. Mejorar el gobierno universitario, terminar con la excesiva rigidez de la enseñanza (solo se pueden hacer dos ciclos al año, llevar un máximo de créditos en cada uno y que los posgrados deben ser presenciales). Mejorar y diversificar la oferta académica permitiendo a las universidades brindar formación técnica o tecnológica y potenciar la innovación, la investigación y el desarrollo de la ciencia.

2. Ley que establezca la carrera docente y del personal que labora en las universidades y toda la educación superior. Esta carrera debe estar basada en el mérito y la mejora continua del desempeño de los docentes.

3. Ley que proteja a los estudiantes de las universidades privadas con licencia denegada. Actualmente la Sunedu no tiene competencias legales para intervenir en estos conflictos.

Vamos a asegurarnos de que los más de 200 mil estudiantes de las 45 universidades que no consiguieron licenciamiento puedan concluir sus estudios. Parte de esta iniciativa legislativa es que el patrimonio de estas universidades sirva para proteger a sus estudiantes.

4. Ley para que los congresistas que tengan conflictos de intereses en temas educativos no puedan presentar proyectos ni participar en votaciones, como el fortalecimiento de la Sunedu, por ejemplo.

Hoy, más que nunca, en tiempos tan duros a causa de pandemia, nuestra mayor y mejor inversión es hacerlo en las capacidades intelectuales y talentos de nuestra gente, para impulsar el crecimiento del país a través de la innovación, creatividad y emprendimiento de nuestros jóvenes. Pongo al servicio toda mi experiencia y vocación de servicio público, porque soy una convencida de que la educación tiene una fuerza transformadora en nuestras vidas y en el desarrollo de nuestro país.