Proteger a las gestantes para reducir la desnutrición

Economista

Una de las claves para reducir la desnutrición crónica infantil es asegurar que el niño nazca con buen peso. Para ello es central que la madre se alimente bien, acuda a sus controles y acceda a suplementos, si los necesita. Para que el embarazo esté atendido adecuadamente se requiere que exista el servicio y esté disponible para las gestantes, y que la futura madre acuda al servicio de salud lo más temprano posible durante su embarazo.

El Minsa, y en particular el SIS, ha adoptado una política agresiva de cobertura universal para toda gestante y niño menor de 3 años (pronto se elevará a 5 años). Con ello, toda mujer embarazada tiene derecho a acceder a controles prenatales y no solo a un mejor embarazo y alumbramiento, sino a que su niño o niña llegue con buen peso y salud, y que este recién nacido cuente con acceso garantizado a la salud en sus primeros años. Con el lanzamiento del programa Bienvenido, este niño tendrá un mejor recibimiento. Todas son noticias positivas del sector Salud, y muestran acciones concretas en la ruta a la garantía del derecho a la salud (pues suma con otras iniciativas como el plan Esperanza y el seguro escolar). El desafío es hacer efectiva la expansión de cobertura para asegurar la prestación de los servicios y su calidad.

Desde el lado de las gestantes, programas como Juntos y programas de consejería de salud y salud comunitaria son fundamentales para que acudan lo más temprano posible a sus controles prenatales. En las zonas rurales, en particular, estas visitas son costosas y muchas mujeres asisten a ellas cuando sus embarazos están avanzados y ya se han perdido valiosas oportunidades de mejorar sus condiciones de salud y las del niño por nacer. Necesitamos más. Necesitamos más campañas e información a nivel local que valoren, premien y reconozcan a la madre gestante –y a su familia– si ella asiste tempranamente a sus controles. Necesitamos que las familias, comunidades y autoridades apoyen los controles prenatales oportunos. Hay que apoyar y facilitar ese proceso. Es una inversión que evitará futuros problemas de salud para estos niños y que facilitará su desarrollo.

Hoy, todos los niños y niñas peruanos nacen con acceso al menos al SIS; comprometámonos a que este acceso traiga cada vez mejores prestaciones, más servicios y más salud para todos ellos; comprometámonos a que se traduzca en menos desnutrición crónica infantil y mortalidad infantil y más desarrollo para nuestros niños. Ahí ganamos todos; ahí protegemos e incluimos para crecer.