Un museo en la ruta

Con toda la expectativa que en la ciudadanía genera el proyecto de la Línea 2 del Metro de Lima, nada justifica que la construcción de una de las entradas a su estación central ponga en riesgo las estructuras del sesquicentenario local del Museo Arte de Lima (MALI), en el Paseo Colón. La Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU) debería responder los distintos requerimientos que se le han enviado para que explique con claridad cuáles son sus planes al respecto.

De hecho, no solo el museo –declarado Patrimonio de la Nación hace casi 50 años– se encuentra bajo amenaza por el curso que se le está dando a este proyecto de transporte masivo; en la Plaza Bolognesi se construiría también una elevada chimenea que compartiría aires con el alto pedestal donde reposa la figura de uno de nuestros héroes de la Guerra del Pacífico. Por otro lado, a la clamorosa escasez de áreas verdes que los limeños endémicamente padecen, se podrían sumar daños irreparables en el que es uno de los espacios más bellos y tradicionales de la ciudad, el Parque de la Exposición, en particular el sector colindante con el MALI.

Sería un acto de incomprensible barbarie que la ejecución de este ramal de Metro no respete preciados monumentos históricos que constituyen rasgos ineludibles de la fisonomía urbana de Lima y sean vistos por las autoridades de transporte únicamente como otro punto en los planos por donde habrá que pasar el caterpillar.

Hasta donde se sabía, cuando se construyó la Estación Central del Metropolitano, bajo el Paseo de los Héroes Navales, se anunció que serviría, asimismo, para conectar ambos servicios. No entendemos las razones del cambio de idea. Y el obcecado silencio de la ATU tampoco ayuda.

Nadie está en contra de la modernidad ni de tan magna obra, pero, como vecinos de la ciudad, nos resistimos a aceptar que esta se lleve a cabo destruyendo patrimonio cultural y llevándose de encuentro un espacio privilegiado para actividades culturales y artísticas, de las que se han beneficiado, y se siguen beneficiando, limeños de toda edad y condición.