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¿Son los guantes desechables efectivos para cuidarse del coronavirus?
¿Cuántas veces se ha hecho hincapié en el uso tanto de mascarillas como de guantes desechables para protegerse del coronavirus? En la vida ya casi cotidiana del último mes, uno ve guantes por todos lados, en las farmacias, cuando vas al supermercado, o si asomas por la ventana, pero ¿son acaso la forma correcta de cuidarse?
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¿Cuántas veces se ha hecho hincapié en el uso tanto de mascarillas como de guantes desechables para protegerse del coronavirus? En la vida ya casi cotidiana del último mes, uno ve guantes por todos lados, en las farmacias, cuando vas al supermercado, o si asomas por la ventana, pero ¿son acaso la forma correcta de cuidarse?
Su uso podría parecer una forma lógica para prevenir contagios. Después de todo, las infecciones con el coronavirus no solo se transmiten por el aire, por ejemplo cuando alguien tose o estornuda cerca de uno, sino también por el tacto. En este caso, si se toca una superficie contaminada con patógenos, estos pasan a las manos. Y si después se toca la cara, el virus puede entrar por la nariz, los ojos o la boca.
Se sabe que los médicos y cirujanos utilizan guantes, sin embargo, estos solo contribuyen a la protección de sustancias espesas como la sangre u otros fluidos corporales. En cuanto a bacterias, debido a su material poroso, solo los protege por una corta cantidad de tiempo, por eso, mientras más tiempo se usan, más sencillo es para la bacteria atravesar esos poros.
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Las variantes desechables de vinilo, látex o nitrilo pueden transmitir una impresión de esterilidad, pero se entienden como un falso sentimiento de seguridad. Es decir, al virus le da igual si entra en el cuerpo desde una mano desnuda o un guante desechable a través del contacto con la cara.
Esto ha sido compartido por algunos especialistas, como el médico alemán Marc Hanefeld, quien lo explicó así en sus redes sociales: “¡Dejen de usar guantes desechables en público! Es un desastre higiénico masivo. Debajo del guante, las bacterias se multiplican felizmente en el ambiente caliente y húmedo. Y después de quitárselos, sin desinfectarse, uno tiene aguas negras en sus manos. ¡Felicidades!”.
Para protegerse a sí mismo y a los conciudadanos del coronavirus, se recomiende seguir las medidas de higiene conocidas y evitar los guantes desechables. Es decir, lavarse bien las manos con jabón, mantener distancia y quedarse en casa.
Para aquellos que aún insistan en usar guantes desechables, los expertos recomiendan que se desechen, después de usarse, igual que las mascarillas: en una bolsa cerrada y en la basura no reciclable.
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