Defensoría del Pueblo insta al Gobierno a dejar de generar un ambiente hostil contra la prensa

Según esta institución, estas expresiones en contra de la periodista solo refuerzan los estereotipos de género, que el Estado tiene la responsabilidad de rechazar y erradicar, pues evidencian y perpetúan la discriminación estructural contra las mujeres.

“Referirse a estos para calificarlas conforme a las expectativas y estereotipos social y culturalmente arraigados es estigmatizante y discriminador”, señalan.

Esta situación, para la Defensoría del Pueblo, se torna particularmente grave, pues es el Gobierno Central el encargado de la elaboración y dirección de una política pública que esté orientada en eliminar este problema, muy enquistado en la sociedad peruana.

Y es que, en el Eje 6 de la Política General de Gobierno para el periodo 2021-2022, se prioriza la participación de las mujeres en espacios públicos; además, en el sexto objetivo de la Política Nacional de Igualdad de Género se advierte la necesidad de reducir la incidencia de patrones socioculturales discriminatorios contra las mujeres en la población.

Asimismo, se compromete la libertad de información, ante los constantes cuestionamientos que se ejercen desde el Gobierno hacia los medios de comunicación. Recordamos que la labor periodística es gravitante para el ejercicio de las libertades de expresión e información de la población, por lo que gozan de un estatus y protección especial para investigar asuntos de interés público, contribuyendo a mantener informada a la sociedad y a fomentar su participación en el debate sobre asuntos de relevancia pública.

De otro lado, dada la posición de poder e influencia de las/los funcionarias/os públicas/os voceras/os del Gobierno, urge que el Estado cumpla con su obligación de garantizarlos derechos fundamentales de las personas en situación de vulnerabilidad, en este caso, las mujeres, que son el 50 % de la población nacional. Para ello, deben evitarse estas declaraciones que exacerben el clima de intolerancia y animadversión, especialmente contra periodistas mujeres.

La persistencia en el país de una cultura machista socialmente tolerada obstaculiza el logro de una igualdad real, que es la base de todo Estado constitucional y democrático de derecho. El Gobierno no puede ser indiferente ante esta problemática.

A pesar de las críticas en su contra desde partidos políticos, gremios periodísticos, la Defensoría del Pueblo y demás organizaciones e instituciones, el primer ministro, Aníbal Torres, aseguró que sus declaraciones fueron tergiversadas.

“Cuando en un reportaje periodístico se afirma que la ausencia de asfaltado en las carreteras de Huancavelica se debe exclusivamente al Gobierno actual y no a los anteriores, se falsea la verdad. Quien distorsiona la verdad no puede ser buena persona ni buen comunicador”, escribió en Twitter.