Promesas incumplidas que pasan factura a toda la clase política

Fecha Actualización

28/02/2021 - 07:00

En época de elecciones, las campañas suelen llenarse de discursos con promesas por doquier. Desde cambios radicales a la estructura del Estado, derrotar a la corrupción y delincuencia, y hasta controlar los precios. Todo a gusto de la audiencia que les aplauda. Pero cuando los políticos llegan al poder, se olvidan de lo ofrecido, dejando a los electores con expectativas rotas y una desconfianza que le pasa factura a toda la clase política.

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Palabras, palabras, palabras...

Hagamos un repaso por las promesas más sonadas en nuestra historia reciente. A inicios de los noventa, Alberto Fujimori (1990-2000) criticaba el shock económico que proponía su principal contendor, Mario Vargas Llosa. Pese a ello, Fujimori terminó aplicando la medida económica y que Dios nos ayude.

También recordemos a Alejandro Toledo (2001-2006), quien levantó la bandera de lucha contra la corrupción. Empero, quien era tildado de “sano y sagrado” no acabó con este mal y, al contrario, es ahora investigado por sus vínculos con Odebrecht.

No se escapa el desaparecido líder aprista, Alan García (2006-2011), quien ofreció en campaña e incluyó en su plan de gobierno reinstaurar la Constitución de 1979 y retornar a la bicameralidad.

Ambas son promesas sin cumplir. Y no olvidemos a Ollanta Humala (2011-2016), quien, en campaña y polo rojo, aseguraba que bajaría el precio del balón de gas a S/12.

Igualmente, Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018) aseguró que no indultaría a Alberto Fujimori; empero, lo terminó haciendo.

Las promesas que se dan en la actual campaña no son diferentes a las anteriores. Políticos como Keiko Fujimori (Fuerza Popular) y Julio Guzmán (Partido Morado) prometen que a fin de año vacunarán a todos los peruanos. Verónika Mendoza (Juntos por el Perú) promete reformar todo el aparato estatal y una nueva Constitución de yapa. Y César Acuña (APP) asegura que si es elegido, tomará un avión para traer al país todas las vacunas contra el coronavirus.

Impacto en el electorado

Las promesas incumplidas no se quedan en el olvido, sino al contrario: dejan un impacto negativo en el concepto que tienen los políticos en la clase política. Según el analista político Gerardo Távara, esta es una de las razones por las que existe tanta desconfianza en ello y en consecuencia, los electores escuchan menos sus propuestas o revisan sus planes de gobierno ya que saben que no cumplirán su palabra.

“En razón de ello, el electorado busca otros aspectos de candidatos para finalmente tomar la decisión por quién votar. La idea de que todos los candidatos mienten, sea cierta o no, es muy extendida. Y tiene que ver con que a lo largo de la historia, varios importantes líderes políticos han hecho promesas que no cumplen”, dijo Távara a Perú21.

Urpi Torrado, CEO de Datum Internacional, agrega que la desconfianza se refleja no solo en el partido político, sino en las autoridades porque “las personas los perciben que forman parte de lo mismo”. Asimismo, sostiene que ello se refleja en las encuestas y resultados de elecciones.

“Es una mezcla de resultados según vemos en los sondeos. Existe una desconfianza y decepción en la clase política. Y esta se da por la promesa incumplida pero también por la gestión misma de cuando son autoridades. Esto genera una decepción y afecta precisamente en la opinión del electorado”, acotó.

¿Y cómo impacta en los ciudadanos? La psicóloga Emil Blondet sostiene que la palabra no cumplida de políticos genera sentimientos de decepción en los ciudadanos por golpear directamente la esperanza de mejora en su vida que habían depositado en ellos.

“La promesa genera una expectativa que, al no ser cumplida, causa decepción, desmoralización y más ahora que la autoestima del país está dañada por la pandemia y los últimos hechos vinculados a las vacunas. Es un daño igual a cuando una persona a la que se tiene confianza no cumple lo ofrecido”, aseveró Blondet.

Távara indica que, a excepción de autoridades regionales y municipales, no existe algún instrumento legal que exija a presidentes y congresistas a cumplir lo que el plan de gobierno establece. “Se debería pensar en un mecanismo de rendición de cuentas y de control de actuación de autoridades para que, de esa manera, los planes de gobierno no sean un mero documento de formalidad”, sostuvo.

Aunque la oferta de candidatos presidenciales y congresistas es amplia, depende de los ciudadanos analizar sus planes de trabajo y la posibilidad de cumplirlos. Pues una vez que voten por ellos y sean elegidos, después no hay lugar a reclamo.

DATOS:

- Urpi Torrado, CEO de Datum Internacional, señala que en estos comicios los temas más importantes para electores son la reactivación económica, salud, el arribo de vacunas, educación, seguridad y lucha contra la corrupción.

- El analista Gerardo Távara advierte que, en la actual campaña electoral, los candidatos ofrecen cosas imposibles de cumplir.

- Estando cerca de las elecciones, un gran porcentaje de peruanos no tiene un candidato presidencial favorito. El 15% votaría en blanco y 18% no sabe, según Datum.

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