Sentencian a exalcaldesa de Cusco Marina Sequeiros por peculado

Exautoridad edil fue encontrada culpable del delito contra la administración pública al comprobarse que entre 2007 y 2008 pagó a su empleada doméstica con dinero del municipio. La condenaron a cuatro años de prisión suspendida.

Redacción PERÚ21

Fecha Actualización

22/08/2019 - 03:57

A cuatro años de prisión suspendida de la libertad y dos años de inhabilitación para ejercer un cargo público fue sentenciada hoy la exalcaldesa provincial de Cusco Marina Sequeiros Montesinos, luego de que se le encontrara culpable del delito contra la administración pública.

El juez Octavio Concha Mora, de la Sala Penal Liquidadora Transitoria de la Corte Superior de Cusco, también dispuso que la exautoridad edil pague una reparación civil de S/.12,000, que deberá abonar en forma solidaria con los demás sentenciados.

Sequeiros fue procesada por el delito contra la administración pública, en sus modalidades de peculado y peculado doloso, por haber pagado entre 2007 y 2008 a su exempleada doméstica María Gibaja Mejía con dinero del Servicio de Limpieza Pública (Selip), órgano desconcentrado del municipio del Cusco.

También fueron sentenciados el director ejecutivo del Selip, Julio César Cornejo Cáceres (ejerció el mismo cargo durante la gestión de Sequeiros), a tres años de pena suspendida de la libertad y a dos años de inhabilitación a ejercer cargo público.

En tanto, los extrabajadores de Selip Norman Eloy Paiva Apaza, José Hugo Astete Luna, Aldo Robert Cusihuallpa Uscachi y Jorge Wendel Ormachea recibieron condenas de entre dos y tres, y de uno a dos años de inhabilitación a cargo público.

Por último, Gibaja Mejía fue sentenciada a tres años de pena suspendida de libertad y a dos años de inhabilitación a un cargo público por el delito contra la administración pública y corrupción de funcionarios.

Todos ellos estarán sujetos a reglas de conducta, entre ellas permanecer en la ciudad del Cusco y presentarse mensualmente ante la Corte Superior de dicha región.

Al culminar la diligencia, la exalcaldesa lamentó el accionar de los magistrados y aseguró que no existen pruebas que la acusen. "No estoy de acuerdo, impondré el recurso de nulidad que la ley me confiere", dijo antes de retirarse en un taxi.

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