Trabajadores vivieron pánico en Las Bambas

Precisamente violencia brutal fue lo que ocurrió en la jornada del jueves último y cuyos detalles recién se conocen. Huesos rotos, mandíbulas quebradas, dientes destrozados y contusiones en la cabeza y otras partes del cuerpo son el resultado de las agresiones que recibió el personal de seguridad de Las Bambas por parte de los comuneros de Fuerabamba que, provistos de bombas molotov, piedras y otros instrumentos, ingresaron a los predios mineros y descargaron toda su violencia como reacción al desalojo que concretó la Policía un día antes.

“Me quisieron desnudar. ‘Te vamos a violar, te vamos a matar’, gritaron. Agarraron una piedra gigante y la tiraron en mi pie derecho. Ahora tengo roto y desviado el hueso y debo someterme a una cirugía de clavos. Además, tengo cinco puntos en la cabeza”, narró Cinthia Malaspina, supervisora de seguridad de la compañía minera sobre los hechos ocurridos el jueves 28, alrededor de las 2:00 p.m.

Cristian Silva, otro miembro de seguridad, contó que buscaron prenderle fuego, pero logró evadir el alcohol que le iban a rociar. “Me empezaron a caer las piedras. Me han fracturado los dientes; los tengo partidos por la mitad y otros doblados”, agregó.

José Luis Chávez y Emilio Mosqueda se sumaron a estos testimonios y narraron que recibieron varios impactos de perdigones luego de que sus escudos y cascos quedaran destrozados. En total, fueron 11 los miembros de seguridad que vivieron aquella jornada de pánico. Seis de ellos permanecen heridos de gravedad.

La empresa Geotec, contratista que realiza perforaciones y exploración para Las Bambas, también se vio afectada por los actos de violencia. Ante la falta de soluciones, podría despedir a más del 50% de sus 400 trabajadores.

“Un 20% se afectará de todas maneras y si la actividad en la mina sigue paralizada, tendremos que prescindir de los servicios de hasta el 50% de nuestro personal especializado”, manifestó a Perú21 Christiam Arce, jefe de Contratos & Valorizaciones de Geotec.

Esta empresa tiene 15 equipos en Las Bambas, cada uno valorizado en aproximadamente US$750 mil, de los cuales solo ocho se encuentran a buen recaudo. Tres de ellos fueron quemados y no se tiene certeza de la condición de otros cuatro, indicó Arce.

La comunidad de Fuerabamba adelantó que rechazará la propuesta de la mesa de diálogo de la PCM, convocada para el sábado 7 de mayo.

“Para nosotros, es una burla y una ofensa que ahora recién nos llegue una carta donde el premier quiere dialogar con nosotros, cuando en su momento lo hemos solicitado. Después de que nos han masacrado, no creo que vamos aceptar esta reunión”, afirmó Edison Vargas, presidente de la comunidad.

Además, aseguró que no se hace responsable de lo que suceda en caso de que la minera intente retomar sus operaciones.

Hasta el viernes, al menos un grupo de comuneros seguía ocupando los predios de la mina mientras las operaciones siguen paralizadas.